En la nota "Buenos Aires: El cierre de cursos es una realidad" habíamos esbozado un panorama numérico acerca del cierre de cursos que fuese establecido por la Disposición Nº 15 - DGEGE - 2012, pero resulta importante el análisis a fondo de los Anexos I, II y III de dicha norma para comprender la gravedad de la problemática para el sistema educativo de la Ciudad.
Si bien parecería escaso el recorte, en realidad, constituye la punta del iceberg porque revela la verdadera intencionalidad política desde el Ministerio de Educación de la Ciudad que se profundizará una vez finalizado el período de inscripciones complementarias que finalizará el próximo 30 de marzo.
Para quienes no son docentes, pero son padres, lo que aquí vamos a explicar es la afectación de esta medida administrativa en lo educativo y en el Derecho a la Educación que tienen sus hijos, por cuanto no solamente comprende el trabajo de muchas y muchos educadores sino también la forma en la cual se van a impartir las clases recientemente iniciadas.
En una primera lectura política, lo dispuesto es un aval más a la Educación Privada y otro severo disciplinamiento a la docencia de la Ciudad. Con respecto a lo primero, debemos recordar que los subsidios a las instituciones privadas ascenderán a 1.500 millones de pesos para el corriente ciclo lectivo, los cuales vienen incrementándose en forma sustantiva desde 2007 y a la vez, resulta una forma de presionar a las y los docentes que aún continuamos con el espíritu de la Educación Pública a través de un toma y daca muy particular, al igual que en las empresas privadas.
Las instituciones privadas de educación vienen consolidando su presencia en la Ciudad desde hace años. Es un fenómeno que viene observándose con mucha atención, por cuanto su matrícula se ha incrementado debido a la mejora de las condiciones socioeconómicas de la clase media desde 2003 y a la necesidad de ésta de "depositar" a sus hijos en la escuela, dicho esto en un sentido freiriano, sin estar afectados por los paros docentes. En efecto, la estrategia política del macrismo fue tensionar la relación con las y los docentes de la Ciudad para que lleguen al paro, con la finalidad última de provocar el trasvasamiento de la matrícula a favor del sector privado. Las negociaciones salariales y laborales, desde el inicio de la gestión macrista y la reciente sanción de la Ley 4109, modificatoria del Estatuto del Docente Municipal, junto a los reclamos por las becas estudiantiles, las viandas y las condiciones edilicias de las escuelas de la Ciudad, han llevado a un sinnúmero de paros dispuestos por los gremios docentes que, en parte, provocaron dicho pase a las escuelas privadas desde la clase media.
El primer recorte
Lo establecido en la medida administrativa que se acaba de conocer implica que es la primera vez que se aplica el mentado Decreto Nº 1990/97. Salvo cierres aislados de cursos o grados, impulsados por ciertos directivos o supervisiones escolares en alguna oportunidad, dicha norma no era aplicada.
Para comprender, como hemos mencionado, su importancia debemos detenernos en algunas cuestiones.
Como bien expresa la Disposición referida, se trata de una primera etapa de "relocalización"; es decir, que ello continuará en el resto del sistema educativo de la Ciudad. No podemos olvidar que no está incluído el que atiende a los adultos en el nivel primario y secundario; el nivel terciario, que abarca a la formación docente y a la formación profesional; a la Educación Artística y a la Educación Especial que, recordemos, tuvo un severo recorte en el Presupuesto 2012 (1).
Por otra parte, este recorte tuvo en cuenta la cantidad de escuelas privadas en los distintos distritos escolares. El Distrito Escolar con mayor cantidad de cierres de grados y/o divisiones es el 10º, el cual se encuentra en los barrios de Belgrano, Núñez, Saavedra y Villa Urquiza, con 45 grados o divisiones cerrados, mientras que el menor tuvo lugar en el 11º, con un cierre.
Si comenzamos a analizar por Distritos Escolares, nos vamos a encontrar con que el aval a lo privado es significativo. Los Distritos Escolares 1º, 2º, 7º, 8º, 9º, 10º, 11º, 14º, 15º y 17º son aquellos en donde es significativa la presencia de la Educación Privada, con instituciones ligadas a sectores empresarios y a la misma Iglesia Católica, comprendiendo a los barrios de Recoleta, San Nicolás, Retiro, Balvanera, Caballito, Almagro, Villa Crespo, Flores, Vélez Sársfield, Parque Avellaneda, Floresta, Chacarita, Villa Ortúzar, Paternal, Agronomía, Villa del Parque, Parque Chas, Villa Urquiza, Saavedra, Coghlan, Villa Devoto, Belgrano, Núñez, Villa Santa Rita, Villa Real, Montecastro, Villa General Mitre, Parque Chacabuco, Boedo, Colegiales y Palermo. Esto último no puede llamarnos la atención, conociendo la profunda relación entre Macri y Bergoglio. Pero las escuelas confesionales tienen un impulso considerable en los Distritos Escolares 4º, 5º, 6º, 13º y 18º, los cuales se encuentran en los barrios de La Boca, San Telmo, Barracas, Parque Patricios, Pompeya, Parque Patricios, San Cristóbal, Balvanera, Boedo, Almagro, Constitución, Villa Luro, Mataderos, Parque Avellaneda, Montecastro, Vélez Sársfield, Floresta, Liniers, Versalles y Villa Lugano. Ocurre que, en ellos, se encuentran diferentes instituciones escolares dependientes de parroquias de la Iglesia Católica que atienden los requerimientos de la clase media baja y en cierta forma, de la clase trabajadora (2). En este último caso, resulta notoria la fragmentación de la zona sur, al no incluírse a aquellos barrios lindantes con Villa Lugano y con el Riachuelo, como Parque Patricios, La Boca o Barracas.
Sin dudas, en estos distritos, el trasvasamiento de la matrícula es considerable pero el pago de favores a la Iglesia es superlativo. No podemos olvidar el veto al Congreso Pedagógico de la Ciudad que iba a presidir Carlos Abrevaya, autor de la Ley que modificó recientemente el Estatuto del Docente Municipal, debido a las fuertes presiones ejercidas por la Comisión de Educación del Arzobispado de Buenos Aires. Tampoco es casual que los subsidios a la Educación Privada recaen en las instituciones escolares de la Iglesia en su gran mayoría.
Si continuamos el análisis por escuela, la que tiene la mayor cantidad de grados o divisiones cerradas es la Escuela Primaria Nº 2 D. E. 7 "Francisco D. Herrera", con 11, seguido de la Nº 6 D. E. 3 "Cnel. Isidoro Suárez", con 6 y sin tener en cuenta que es una institución de jornada simple con comedor, al igual que la Escuela Primaria Nº 2 D. E. 6 "José María Gutiérrez" a la cual le cerraron dos grados. A 19 escuelas de nivel primario, solamente les cerraron un grado, mientras que a otras entre dos y tres.
En el nivel medio, el Colegio Nº 8 D. E. 10 "Julio A. Roca" y el Nº 16 D. E. 15 "Guillermo Rawson" son las instituciones que sufrieron un recorte significativo al cerrarse 5 divisiones, mientras que 10 escuelas solamente tuvieron que cerrar una división.
En las escuelas técnicas, la Escuela Nº 28 D. E. 10 "República Francesa" y la Nº 24 D. E. 17 "Defensa de Buenos Aires" sufren el cierre de 3 divisiones, mientras que otras tuvieron que cerrar entre una y dos divisiones.
Otro dato significativo son los cierres por turno. Las escuelas primarias con turno completo cerrarán 54 grados, mientras que las de jornada simple, recortarán 54 grados en el turno tarde y 35, en el turno mañana; las escuelas medias en general sufrirán el cierre de 20 divisiones en el turno noche; 17, en el turno tarde; 9, en el turno vespertino y 7, en el turno mañana, y las escuelas técnicas tampoco se salvan porque cierran 11, en el turno noche; 8, en el turno tarde; 5, en el turno mañana y 1 en el turno vespertino.
Si tenemos en cuenta que la mayoría de las escuelas parroquiales tienen la modalidad de escolaridad primaria, no puede sorprendernos el cierre elevado de grados en las escuelas con turno completo y/o jornada simple. Si esto no es un aliento a este tipo de instituciones, poco le falta...
Con respecto a las escuelas medias, los cierres debemos relacionarlos con el incremento en la matrícula de aquellas escuelas privadas que no tienen el patrocinio eclesiástico en su gran mayoría. Lo mismo sucede con las escuelas técnicas.
Sin embargo, y pese a la norma que establece el cierre, podemos constatar que el Distrito Escolar 5º tendrá dos cierres de cursos a nivel medio y técnico, aunque los considerandos lo excluyen del recorte pero también puede advertirse que algunas instituciones escolares ubicadas en los sectores considerados "privilegiados" por el Gobierno de la Ciudad atienden a una población escolar que, en su gran mayoría, provienen de la zona sur de la Ciudad. El ejemplo palpable es el Comercial Nº 3 "Hipólito Vieytes", donde se cerrarán dos divisiones de 5º año según lo dispuesto en los Anexos pero, en realidad, sería una sola por cuanto existen tres divisiones en dicho grado escolar.
Por último, recordando que no se afectarán los últimos años de las escuelas medias, según los considerandos de la mentada Disposición, nos encontramos con sorpresas. Se cierran 27 divisiones de 5º año y 14 divisiones de 4º año, en el nivel medio, y 3 divisiones de 6º año y 7 divisiones de 5º año, en las escuelas técnicas; es decir, que lo establecido en los Anexos se contradice con los cierres de cursos que se manifiestan en ellos.
Las consecuencias
Desde luego, no son pocas y no podemos circunscribirlas al despido encubierto de docentes interinos y con mayor incidencia aún, de suplentes. En el lenguaje neoliberal, podríamos decir que constituye un "sinceramiento" de la matrícula; es decir, el reconocimiento estatal al pase masivo de la población escolar perteneciente a la clase media, a la Educación Privada.
Demás está decir que este proceso tiende a la privatización del sistema educativo porteño a mediano plazo. El objetivo actual en materia educativa, sin dudas, consiste en continuar alentando el trasvasamiento de la matrícula con el fin de conformar una Educación Pública para pobres, como red de contención de las problemáticas sociales pero sin atenderlas en su verdadera dimensión.
La otra gran consecuencia, también señalada por Ademys, será la gran cantidad de alumnos por curso, lo cual representa un grave problema a nivel pedagógico, dependiendo del tipo de población escolar. A mayor vulnerabilidad, debería reducirse la cantidad de alumnos por grado o división. Del mismo modo, en el caso de los repetidores o excedidos en la edad. No es casualidad que se haya excluído a buena parte de la zona sur. Ocurre que allí se encuentra el capital electoral del PRO, de la mano del Ministro Santilli y en parte, del Diputado Ritondo; ambos, provenientes del duhaldismo, como también el hecho de su alta vulnerabilidad social.
Precisamente, la mayor cantidad de alumnos por curso, en el caso de continuarse con el cierre de cursos, en aquellas instituciones educativas situadas en los barrios poblados por la clase media también tiene la finalidad de empujar la migración a la Educación Privada. Cursos atiborrados, profesores y maestros que no dan abasto para atender todas y cada una de las problemáticas serán las que incidirán en la "calidad educativa" que pregonan.
No obstante, la Escuela Pública tenderá a chilenizarse. Como buenos alumnos del pinochetismo y del Presidente Piñera, el macrismo aspira a que ésta se constituya en la herramienta para instalar las normas y valores de la dominación a los sectores medio bajos y bajos de la sociedad porteña.
Ocurre que, una vez concluído el proceso de trasvasamiento, la tarea posterior es crear un plantel docente destinado a la perpetuación de dicha escala neoliberal. En parte, ya se está efectuando con la equiparación en el puntaje a los docentes provenientes del sector privado, pero no faltará mucho para que éstos tengan la supremacía a la hora de tomar cargos u horas cátedra. Precisamente, la implementación de la Oficina Única tiende a facilitar la designación arbitraria; entre ellas, la de este tipo de docentes.
Ante este panorama, solamente la lucha conjunta de docentes, padres y estudiantes podrá enfrentar al Goliat macrista. De otro modo, la Escuela Pública quedará reducida a cenizas y sin poder cumplir con su histórica función: la de formar personas y ciudadanos en una plena igualdad de oportunidades, siendo el verdadero motor de la movilidad social ascendente.
NOTAS:
(1) La reducción presupuestaria en la Educación Especial fue informada en la nota Los números del Presupuesto Educativo 2012: Recortes en Educación Especial.
(2) En los archivos adjuntos, puede advertirse el contenido de esta nota. El Anexo I es un único archivo donde encontrarán el listado de los grados, secciones y/o divisiones en la actualidad y los que serán cerrados por escuela y Distrito Escolar, al que agregamos el barrio capitalino en donde se encuentra cada institución educativa, mientras que el Cierre de grados y/o divisiones por D. E. y por turno, permite visualizar en particular los cursos cerrados por D. E. y por turno. Precisamente, de ambos, surgió el análisis que hemos realizado.
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