Mediante el comunicado titulado "Que Duhalde se llame a silencio y responda ante la justicia por la Masacre de Avellaneda: la memoria de Darío y de Maxi no se mancha", los familiares y compañeros de Dario Santillán y Maximiliano Kosteki mostraron su indignación "ante la falta de respeto permanente de Eduardo Duhalde, quien nunca respondió ante la justicia por los asesinatos que ordenó cometer en la Masacre de Avellaneda".
Según afirmaron, las declaraciones del ex presidente en un reportaje al Diario La Nación son "el colmo del cinismo" y sostuvieron que "ni Darío ni Maxi serán nunca hijos de un asesino como Eduardo Duhalde".
Y agregaron, "si no hay justicia, hay escrache. Y Duhalde debe responder ante la Justicia antes de atreverse a hablar de nuestros compañeros como si hubiera sido ajeno a la sangrienta represión" para, luego, recordar el rol del gobierno duhaldista en la Masacre de Avellaneda y su responsabilidad política por lo acontecido.
Concluyeron, afirmando que "seguimos la lucha, con más impulso porque hemos logrado que la Estación en donde cayeron deje de llamarse Avellaneda: en lugar de honrar a un personaje de la oligarquía, ahora pasó a llamarse Estación Darío Santillán - Maximiliano Kosteki" como también renovaron su exigencia de juicio y castigo a los responsables.
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