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Carta Abierta a Ana Dorfman
Ana:
Hace muchos años que nos conocemos y que intentamos comprenderte y justificarte. Por eso nos duele.
No podemos decir que lo tuyo nos asombra porque antecedentes sobran, pero esta vez llegaste al límite en el cual callar es transformarse en cómplice.
¿Por qué esta Carta es Abierta?
Porque entendemos que cuando está en juego tanta injusticia y las conductas se agravan y multiplican, ya no hay lugar posible para nada que pueda lindar con el amiguismo o el “no quedar mal”, actitudes que - por otro lado - bien sabés nunca nos caracterizaron.
Además, hoy más que nunca es indispensable que todos tengamos en claro dónde y para qué está cada uno.
Obviamente, el tema es tu opinión y propuesta sobre la prórroga del cumplimiento del cupo laboral en la Ciudad de Buenos Aires, tal como figura en el correo reproducido (ver abajo).
No sabemos si finalmente el Comité Asesor o alguna de las organizaciones miembros tomó alguna determinación, como por ejemplo: 1) manifestar su disconformidad con la prórroga del cumplimiento del cupo elaborando un inconducente documento por la “medida tomada” (eufemismo éste usado para disfrazar el avasallamiento de derechos), 2) ser fiel a la conducta de no sacar los pies del plato para que no le saquen el plato donde se nutren mezquinos intereses personales y/o sectarios o si, 3) en un rapto de locura ética jugarse por la suerte de quienes dicen representar y tomar alguna medida realmente eficaz para enfrentar y modificar una realidad injusta, conducta necesariamente comprometida y poco frecuente en este medio que, como todas ellas, conllevan seguras represalias indeseables a cargo de quienes reparten favores políticos y de los otros.
No sabemos. No sabemos qué sucedió finalmente.
Lo que sí sabemos es que para permanecer sin perjudicar a nadie en los lugares donde estás - y en aquellos donde pretendés estar en el futuro - debés al menos aprender a evaluar la dimensión del daño a personas que está en juego y a entender que la realidad que viven otros no es la tuya ni la de quienes te ocupás directamente (esto siempre y cuando lo que te impulse a decir este tipo de disparates no tenga otras causas).
Es con este fin que te sugerimos hagas el siguiente ejercicio. No te demandará más que unos pocos minutos y puede ser trascendente para tu vida y la de otros:
1º) Buscá el lugar más tranquilo y silencioso que conozcas. Ponete cómoda, relajate, cerrá los ojos y representá mentalmente cuál sería tu realidad y cómo te sentirías en ese solo día si estuvieras en las siguientes circunstancias:
a) Sola y sin un centavo porque no tenés empleo.
b) Sin dinero por la misma razón y tus familiares y/o amigos haciéndose cargo de tus necesidades pese a sus escasos ingresos.
No importa que nunca lo hayas vivido, hacé un esfuerzo y como si estuvieras bajo cualquiera de esas dos situaciones, intenta sentir tu estado de ánimo… imagina a tu familia… a tu casa. No dejes de abundar en los detalles, por más intrascendentes que te parezcan.
2º) Una vez logrado el estado del punto anterior, multiplica lo que sentís por 365 veces. A ese resultado multiplícalo por el número de años que pasaron desde que estabas en capacidad de trabajar, de valerte por vos misma, pero no te dejaron.
3º) Ahora ponete al mismo tiempo en la piel de los miles y miles que viven esa realidad (que no es la tuya). Esto no es fácil, pero hacé el intento, aunque sin exagerar porque uno no está preparado para sentir tanto dolor.
Si no lo conseguís no importa, basta con que te pongas en el lugar de uno solo de tantos miles.
Una vez que lo hayas conseguido persistí consciente de lo que sentís el mayor tiempo posible. Luego, respirá profundamente dos o tres veces y volvé a tu propia realidad.
Eso es todo.
(Aclaración: no es necesario que durante el ejercicio te imagines tener una discapacidad que no tenés pero, si podés hacerlo resultaría mejor).
Si terminada la experiencia seguís pensando que la prórroga de un año es “razonable” (suponiendo que fuera cierto que en un año se cumpla con el cupo), quedate junto a quienes pueden suspender con toda liviandad de conciencia un derecho tan esencial durante cinco años o un año (total, parece que uno o cinco con opción a cinco más son lo mismo y lo que se podía cumplir en diez se puede cumplir en uno), quedate con aquellos (que son los mismos) a quienes justificás porque se justifican diciendo que dos años no le alcanzan porque la culpa siempre la tienen los que se fueron y, fundamentalmente, quedate al lado de quienes piensan y actúan como vos.
Quedate con ellos pero, por favor, si es posible evitá ocupar lugares de responsabilidad desde donde se puede hacer mucho daño. Quienes no respetan los derechos de las personas con discapacidad - y de otros - necesitan de personas “representativas del sector” que digan ese tipo de cosas o que se callen.
Ya hay demasiados de éstos. Sobran.
Cuando leimos tu correo también nos preguntamos: ¿es coherente que en las “1ras. Jornadas de Difusión y Seguimiento de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad” haya hablado en representación del Comité Asesor quien es capaz de considerar “razonable” semejante injusticia?
No dudamos en respondernos que sí, que es coherente.
Tampoco dudamos de que Abraham Felperín no la hubiera considerado “razonable”.
Máximo Gómez Villafañe Carlos Scally
Palabras de Ana Dorfman sobre la prórroga del cupo laboral en la Ciudad de Buenos Aires
Estimados, según surge del documento ad supra, la prórroga se modificó, de 5 años pasó a 1 año. A mi parecer, este gobierno solo tuvo 2 años para cumplir el cupo, dado que según manifestaron, antes de su llegada no se había hecho nada, solo la implementación del banco de postulantes.
Por lo que creo que una prórroga de un año es razonable.
Igualmente, si alguien puede acreditar fehacientemente este cambio, realizar la gestión correspondiente y luego avisar.
Espero sus comentarios, ya que de estar de acuerdo conmigo, quedaría sin efecto la elaboración del documento a mi cargo acerca de la disconformidad de este Comité por la medida tomada.
Saludos cordiales,
Ana Dorfman AMIA
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