Venado Tuerto: La bandera de Clemente

Cle 06

Por el Prof. Juan Carlos Sánchez

Fotos: Pulga Brandoni

El pasado 24 de septiembre estuvimos en la conmemoración del 18º aniversario del asesinato de Clemente Arona, el joven motociclista atropellado por el patrullero conducido por Roberto José Mandelli, que tuvo lugar en la Plaza San Martín de Venado Tuerto tal como se viene llevando a cabo todos los años. Esta vez, como lo resaltó Ana Braghieri, coincidió con la fecha de fallecimiento de su hijo y ello no es un dato menor pues contribuyó a la emoción de las y los presentes en dicho acto.

Cle 03Concurrimos los de siempre, los familiares y los amigos de fierro para seguir denunciando las injusticias ante una sociedad venadense que prefiere cerrar los ojos ante ellas, pero que no pasarán de largo a la vista de los autores intelectuales y materiales de ese asesinato que la prensa prefirió calificar de "accidente". Tuvieron que pasar muchos años de lucha para que se revierta, en forma contundente, dicha calificación.

Como veníamos pensando, no estuvo ningún dirigente político o funcionario. Es lógico, forman parte de la burguesía venadense que hoy vive de la soja y que poco le importan los Derechos Humanos. Mucho menos, las injusticias que produce el sistema del cual forman parte.

Fuimos pocos los oradores para un acto de semejante trascendencia. Y los medios brillaron por su ausencia y tan sólo contribuyeron algunos con unas pocas líneas. Pasó mucho tiempo y por eso no da rédito recordar ese artero acto cometido en las cercanías de la Ruta 8. El verdadero compromiso lo asumimos quienes pusimos el cuerpo junto a la madre del joven motociclista asesinado y su familia como también elevar nuestra voz frente a una realidad nacional que, si bien no asombra, es candente: coincidió con la desaparición de Santiago Maldonado en Chubut.

Cle 05Ana Braghieri, esa madraza que tiene ese coraje al igual que las Madres de Plaza de Mayo - Línea Fundadora, afirmó que todo terminó con la prescripción de la causa penal pero que se realizaba el acto para que lo vean los autores del asesinato de su hijo. Por otra parte, sostuvo que daría lugar a la denuncia de todas las injusticias "porque Clemente es bandera".

En el ambiente chico flotaban los recuerdos y también la actualidad. Clemente, Luciano Arruga y Santiago Maldonado se fusionaban entre las palabras de aquellos que hicieron uso de la palabra para denunciar la barbarie del sistema capitalista. Y muchas y muchos nos acordábamos de la bandera plantada por Vanesa Orieta, durante el segundo acto por el joven artesano desaparecido en el Pu Lof Cushamen: "Los gobiernos constitucionales matan, torturan y desaparecen en democracia".

Poca gente y mucha emoción. El deber militante ya estaba cumplido. Pero volvimos a reafirmar que no olvidamos, no perdonamos y no nos reconciliamos con los represores y genocidas. Y ello no es poca cosa, cuando se trata de una democracia devaluada donde la división de poderes no existe y la represión avanza en forma implacable sobre los pibes de los barrios y las y los trabajadores.

No es tiempo para tibios. Es hora de lucha y defender nuestros derechos que pretenden ser arrasados en nombre de la "gobernabilidad". Si realmente queremos cambiar, hay que amasar la Revolución con nuestras manos para construir la Argentina socialista que nos merecemos. De lo contrario, el capitalismo seguirá matando como hasta ahora, por la vía de las balas o la de la política económica y social, recordando que ésta última es tan letal como una bala de plomo.

Seguramente volveremos el año próximo para continuar dando testimonio y recordar, como el Che, que el capitalismo es el genocida más respetado de la historia.

Cle 01

Cle 04

Cle 02