Estamos orgullosos de la lucha de nuestros hijos, por padres de los estudiantes del Julio Cortázar.     ESTAMOS ORGULLOSOS DE LA LUCHA DE NUESTROS HIJOS Acompañamos, nos solidarizamos y nos sumamos a la lucha que encabezan los estudiantes s...

Estamos orgullosos de la lucha de nuestros hijos, por padres de los estudiantes del Julio Cortázar.

 


 


ESTAMOS ORGULLOSOS DE LA LUCHA DE NUESTROS HIJOS


Acompañamos, nos solidarizamos y nos sumamos a la lucha que encabezan los estudiantes secundarios de la ciudad de Buenos Aires.

Reivindicamos su derecho constitucional de peticionar a las autoridades, intervenir en forma democrática en las vicisitudes de la comunidad, expresar su pensamiento y organizarse para defender sus derechos.

Asumimos la responsabilidad que como adultos nos compete en el cuidado de nuestros hijos y los hijos de todos, en tanto sujetos de derecho, a una educación digna e igualitaria.

Coincidimos plenamente en la defensa de una educación pública en tanto derecho elemental que -junto con la salud, el trabajo y la vivienda-, corresponde se encuentre garantizado por el Estado para que pueda ser desarrollado en condiciones dignas en lo edilicio, institucional y en lo académico pedagógico.

Advertimos la falta de cumplimiento de los compromisos, de los plazos y de los planes de trabajo por parte del Ejecutivo. Es por ello que exigimos al Ministerio de Educación la ejecución del presupuesto aprobado para este año y al Poder Legislativo el control del mismo, de acuerdo al mandato que se les diera con el voto en forma republicana.

Repudiamos todo intento de demonizar, delincuenciar y judicializar la lucha de los adolescentes. Entendemos que tales métodos procuran desviar la valiente iniciativa de los estudiantes secundarios a la hora de ejercer sus derechos en forma pacífica y democrática.

Sostenemos la respuesta política de la comunidad educativa en tanto el conflicto ha sido provocado por el gobierno porteño en estos términos. De tal modo, se unifica con la de los gremios docentes en defensa del salario y condiciones laborales.

Repudiamos todo intento represivo, persecutorio y discriminatorio con que amenazan los funcionarios del GCBA y sus cómplices, así como las agresiones perpetradas por los medios informativos a los estudiantes que manifiestan por sus derechos.

Compartimos con nuestros hijos las medidas que adopten en defensa de la comunidad educativa y acompañaremos desde el lugar que ellos requieran en tanto su escolaridad se inscribe en la vida misma que compartimos. Nos llena de orgullo y respeto la solidaridad y unión con que desarrollan la lucha por sus reivindicaciones, quebrando el miedo y el silencio que arrastra esta sociedad desde hace demasiado tiempo.

Coincidimos en que la toma ha sido el último recurso luego de un extenso camino recorrido en el intento de hacer escuchar estos y otros reclamos y que sólo frente a esta instancia el ministerio ha abierto un canal de diálogo, sin el cual no se hubieran acercado a las escuelas los equipos técnicos, ni se hubiera avanzado con ineficientes planes de obra, ni se hubieran propiciado las reuniones entre los representantes del movimiento estudiantil y ese Ministerio.

Padres de los alumnos del colegio Julio Cortázar

No hay comentarios. :

Publicar un comentario