Sí, señora Alesso, hay que discutir… Sí, señora Alesso, hay que discutir… Por Andrés Sarlengo (Contrapuntos - FM Nostalgia - Venado Tuerto - Santa Fé). “Sería en verdad una acti...

Sí, señora Alesso, hay que discutir…

Sí, señora Alesso, hay que discutir…







Andres Sarlengo 4

Por Andrés Sarlengo (Contrapuntos - FM Nostalgia - Venado Tuerto - Santa Fé).


“Sería en verdad una actitud ingenua esperar que las clases dominantes desarrollasen una forma de educación que permitiese a las clases dominadas percibir las injusticias sociales en forma crìtica”.

Paulo Freire en La importancia de leer y el proceso de liberación.


sonia alessoEl artículo publicado el pasado 30 de diciembre de 2011 en el diario La Capital por Sonia Alesso, Secretaria General de la comisión provincial de la Asociación de Magisterio de Santa Fe (Amsafe) y Secretaria General Adjunta de la Confederación de Trabajadores de la Educaciòn de la República Argentina (CTERA), merece algunas consideraciones.

“Las políticas neoliberales que desde el Estado nacional y los Estados provinciales se llevaron adelante desde la dictadura y continuaron en los años noventa produjeron un descenso del presupuesto educativo y un deterioro en las condiciones de trabajo de los docentes. La expresión más clara de estas políticas neoliberales en el ámbito educativo fue la ley federal de educación. Enseñar en dicho período significó para los maestros y profesores asistir al retiro del Estado de su responsabilidad de financiar la educación pública. Fue también un proceso de fuerte deterioro de nuestras condiciones de trabajo”, señala Alesso al iniciar su texto titulado “Los directores de escuela no son arquitectos ni ingenieros (1)”.

Líneas más adelante Alesso sostiene: “Este retiro del Estado impactó en nuestro trabajo en términos materiales y simbólicos, el Estado educador fue reemplazado por el Estado subsidiario. Separados del control de nuestro trabajo, ya que éste estaba definido por tecnócratas que nos decían qué debíamos enseñar y cómo (…) (1)”.

Veamos.

Parafraseando a Thomas Mann: nadie escribe una oración completa sin denunciarse. Y esto no es verbalismo puro; la práctica política (y sindical en este caso) comienza en el lenguaje.

¿Las políticas neoliberales que “se llevaron adelante desde la dictadura y continuaron en los años 90 “ realmente se fueron?

¿Entre 1976 y 1983 hubo una dictadura o Terrorismo de Estado, Sra. Alesso? ¿Puede un Estado terrorista convertirse 30 años después en una democracia plena y solidaria?

“El objetivo del golpe fue recuperar la autoridad del capital”, asevera Leónidas Ceruti en La democracia entre preguntas (2). Y muchas de esas empresas capitalistas que promovieron el Terrorismo de Estado -Sra. Alesso- son también hoy sostén principal de las políticas educacionales nacionales y provinciales.

Hermes Binner¿Acaso Hermes Binner no acordó las Pasantías Profesionalizantes de los estudiantes de las escuelas técnicas con la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe) (3)? ¿Acaso Elida Rasino no alabó el modelo educativo chileno (Doctrina del Shock, mediante (4)? ¿Acaso el ex Ministro de Educación de la Naciòn Daniel Filmus no subrayó en una asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en el 2004: “Con el grupo Techint, la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) estamos trabajando para encontrar núcleos de escuelas técnicas, a las que podamos actualizar tecnológicamente y con las que articulemos pasantías en las fábricas (5)”? Y meses después la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y el Ministerio de Educación firmaron un convenio para promover la “vinculación de las escuelas con las empresas”. ¿Será por eso que el “volver a valorar con mucha fuerza la formación técnica de nuestros jóvenes (como sentenció Néstor Kirchner) justifica el acuerdo gubernamental y pedagógico con “Aceitera General Deheza, Acindar, Arcor, Aguas Argentinas - Aguas Córdoba, Bayer, Bridgestone - Firestone, Cencosud, Cervecería y Maltería Quilmes, Coto, Daimler - Chrysler, Dow Química, Edenor, Gas Natural Ban, Grupo Clarín, Grupo Roggio, Fiat, Bagó, LA NACION, Loma Negra, IBM, IRSA, Mastellone, Movicom, Molinos, Quickfood, Petrobras, Praxair de Argentina, Repsol YPF, Roemmers, Techint, Telefónica, Telecom, TN & Platex, Unilever y Volkswagen (5)”?



¿Acaso el albergue de solteros de Acindar no fue uno de los primeros centros clandestinos de represión desde 1975? ¿Acaso Roggio y Arcor no fueron socios originarios de la Fundación Mediterránea de Cavallo y cía? ¿Y Clarín y La Nación y Papel Prensa? ¿Y el oligopolio de Telecom y Telefónica?

¿Còmo es eso que los 90 no siguen vigentes? ¿Volver a contar con las escuelas técnicas para subordinarlas a los intereses de la AEA?

El Estado nunca se retiró -Sra. Alesso-; mutó desde 1853 para garantizar el predominio (vía consenso y/o represión) de los poderosos. Como insiste Atilio Borón: el dilema no es más Estado y menos mercado, si no más democracia y menos capitalismo.

¿Acaso Filmus no fué Jefe de Asesores de la ex Ministra Susana Decibe (6)?

Fue el propio Juan Carlos Tedesco quien al dejar el Ministerio de Educación exclamó: “La historia de las últimas seis décadas es la historia de las reformas y, al mismo tiempo, todo sigue igual (7) “.

Nadie duda que hay más presupuesto y “responsabilidad del Estado” en la educación “pública”, Sra. Alesso. Aunque también cabe decir que lo público va subordinándose cada vez màs a intereses corporativos y privados.  “La escuela no puede estar al servicio de las empresas y muchos menos las empresas tienen que dictar lo que se tiene que hacer en las escuelas”, reflexiona Rosa Cañadell (7).

Si la “dictadura” fue la desaparición forzada de personas; hoy pervivimos la desaparición desasosegada de lo público (aunque paradojalmente se invierta más) para beneficio de la plutocracia.

Sra. Alesso, viene bien recordar lo que precisa Laura Marrone: “La búsqueda de consenso fue parte del diseño de la Reforma Educativa. FLACSO, organizó en el ' 93 un seminario internacional para promover la búsqueda de consenso para la aplicación de la Reforma del que participaron representantes del gobierno de Menem, el CONSUDEC, la UNESCO, la Fundación Ford y la propia CTERA. Marta Maffei, dirigente de CTERA manifestó en ese seminario que “la LFE es un modelo de concertación, en el cual se dio satisfacción a cada una de las partes. Esta ley hoy hay que reglamentarla (9)”.

De FLACSO provienen Filmus, Decibe, Tedesco y la fallecida Braslavsky (5).

Asimismo, Darío Balvidares es terminante o al menos discutible, cuando piensa la reforma educativa del kirchnerismo: “La Ley Nacional de Educación es, discurso progresista mediante, la continuidad de las mismas políticas de reforma. Veamos, muy simplemente, las entidades financieras son las mismas, los organismos como la UNESCO y la CEPAL son los mismos, más otra cantidad de microrganismos creados para la ocasión como el CINDE o el Programa PREAL que explico en La Novela Educativa..., los pensadores, teóricos y técnicos que llevan a cabo la reforma, son los mismos; las organizaciones intermedias, llámense ONGs u OSC, en este caso son más que en los noventa, más las fundaciones de las grandes corporaciones como Fundación Antorchas, Bunge, Noble, etc.; deberíamos recordar a Coca - Cola, a Monsanto, a Skanka, a la minera Barrick Gold o a la otra minera: Bajo la Alumbrera en Catamarca y cientos más que gozan de ciertas prebendas por su “aporte” a la educación; sobre todo esta últimas que son “donantes” de la fundación Cimientos, quien maneja parte de los programas de becas (…) Se trata de un embriagante maridaje entre la educación pública y los intereses privados: las grandes mayorías formadas, o mejor, formateadas al servicio de la producción (de las ganancias privadas) (10)”.  

En definitiva, Sra. Alesso, habría que discutir con los y las docentes si los ' 90 se fueron realmente…

Mientras los banqueros ganaron en el 2010, 1.250.000 pesos por hora (11); el salario inicial docente acordado entre el gobierno y los sindicatos nacionales para el 2011 fue “de 2.300 a partir de marzo y 2.340 pesos desde julio (12)”.

Sí, señora Alesso, hay que discutir (y mucho) còmo mejorar las condiciones de enseñar y aprender en Santa Fe y Argentina. Coincidimos en esa labor pendiente.

Eso sí, creo también que tendríamos que atrevernos a educar más allá del capital.

De nosotros depende que la educación deje de ser la ramera predilecta y coqueta que los gerentes de la plutocracia desean.

Que el 2012 nos encuentre con los ojos bien abiertos.


NOTAS

1) La Capital. 30-12-2011

2) Andrés Sarlengo. 2009.





7) Objetivos 2021. Proponen metas para la educación. Erradicar la pobreza, prioridad regional. Silvia Premat. La Nación. 16/06/2010.

8) La empresa dentro de la escuela. Rebelión. 29/11/2011

9) Análisis comparativo de la Ley Federal de Educación (24.195) y la Ley de Educación Nacional (26.206) ¿Compartiendo ADN? Vanesa Carril, Laura  Marrone, Soledad Tejera.

10) La democracia entre preguntas. Andrés Sarlengo. 2009.

11) La banca argentina cerró su mejor año en toda la década. Javier Blanco. La Nación. 08/01/2011

12) La paritaria docente sacó aprobado. Laura Vales. Página 12. 23/02/2011

No hay comentarios. :

Publicar un comentario