
Por Eva Golinger
Recientemente, varios portavoces del gobierno de Barack Obama han declarado con firmeza que el gobierno de Estados Unidos no está interviniendo en los asuntos internos de Venezuela. La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, dijo el 19 de febrero de 2015, “Las acusaciones hechas por el gobierno de Venezuela de que Estados Unidos está involucrado en la conspiración golpista y la desestabilización son infundadas y falsas”. Psaki luego reiteró una declaración extrañamente errónea que había hecho durante una conferencia de prensa justo un día antes: “Estados Unidos no apoya las transiciones políticas por medios no constitucionales”.
Cualquier persona con un conocimiento mínimo de América Latina y de historia mundial sabe que lo dicho por Psaki es falso. El gobierno estadounidense ha apoyado, alentado y promovido golpes de estado en América Latina y en todo el mundo durante más de un siglo. Algunos de los más notorios que han sido reconocidos abiertamente por ex presidentes de Estados Unidos y funcionarios de alto nivel incluyen golpes de estado contra Mohammed Mossadegh, en Irán, en 1953; Jacobo Arbenz, en Guatemala, en 1954; Patrice Lumumba, en el Congo, en 1960; Joao Goulart, de Brasil, en 1964 y Salvador Allende, en Chile, en 1973. Más recientemente, en el siglo XXI, el gobierno de Estados Unidos apoyó abiertamente los golpes de Estado contra el presidente Hugo Chávez, en Venezuela, en 2002; Jean Bertrand Aristide, de Haití, en 2004 y José Manuel Zelaya, de Honduras, en 2009. Una amplia evidencia de la participación de la CIA y otros organismos de Estados Unidos en todos estos derrocamientos inconstitucionales de gobiernos elegidos democráticamente abunda. Lo que todos los líderes derrocados tenían en común era su falta de voluntad para someterse a los intereses estadounidenses.
A pesar de las falsas afirmaciones del gobierno de Estados Unidos, después de que Hugo Chávez fuera elegido presidente de Venezuela por una abrumadora mayoría en 1998, y posteriormente se negó a recibir órdenes de Washington, se convirtió en un objetivo rápido de la agresión estadounidense. Después del fracaso del golpe de Estado apoyado por Estados Unidos que derrocó brevemente a Chávez en 2002, y su posterior rescate por millones de venezolanos y fuerzas armadas leales, Estados Unidos aumentó la hostilidad hacia la nación rica en petróleo. Después del fallecimiento de Chávez en 2013, su sucesor electo democráticamente, Nicolás Maduro, se convirtió en víctima de los ataques del norte.
Lo que sigue es un breve resumen y una selección de más de una década de agresión de Estados Unidos hacia Venezuela que muestra claramente una guerra unilateral. Venezuela nunca ha amenazado o tomado ningún tipo de medidas para dañar a Estados Unidos o sus intereses. Sin embargo, Venezuela, tanto bajo Chávez y Maduro -dos presidentes que han ejercido la soberanía de Venezuela y el derecho a la auto determinación- ha sido víctima permanente de acciones continuas, hostiles y cada vez más agresivas de Washington.
2002 - 2004
Un golpe de Estado contra el Presidente Hugo Chávez se llevó a cabo el 11 de abril de 2002. Documentos obtenidos bajo la Ley de Libertad de Información (FOIA) en Estados Unidos evidencian un claro papel del gobierno estadounidense en el golpe de Estado, así como su apoyo financiero y político para aquellos venezolanos involucrados.
Los documentos evidencian también que altos funcionarios de Washington sostuvieron reuniones con Pedro Carmona, quien asumió el poder de manera ilegítima luego de derrocar al Presidente Chávez durante el golpe. La Embajada de Estados Unidos en Caracas calificó a Carmona como el “hombre correcto para el momento correcto en Venezuela”, en un documento redactado en diciembre de 2001.
La National Endowment for Democracy (NED), agencia pública de Estados Unidos, canalizó más de 2 millones de dólares durante los 6 meses antes del golpe a los partidos políticos, organizaciones y grupos empresariales venezolanos que estuvieron involucrados en el golpe de Estado.
Los agregados militares de Estados Unidos que trabajaban en Venezuela estuvieron en contacto directo con los militares venezolanos que participaron en el golpe de Estado.
Documentos ultrasecretos de la CIA obtenidos en mis investigaciones usando FOIA evidenciaron que la CIA tenía en sus manos los planes detallados del golpe de Estado desde el 6 de abril del 2002.
El embajador de Estados Unidos en Venezuela, Charles Shapiro, mantuvo contacto permanente con todos los participantes en el golpe, incluso con el dueño del principal canal de televisión, Venevisión, canal que transmitió las imágenes manipuladas para justificar el golpe. Shapiro sostuvo reuniones con los dueños de los medios privados en Venezuela durante el día del golpe de Estado.
Horas después de secuestrar al Presidente Chávez e imponer un estado dictatorial en Venezuela, el vocero de la Casa Blanca, Ari Fleischer, leyó un comunicado del Presidente George W. Bush apoyando al nuevo gobierno de facto y responsabilizando al Presidente Chávez por los sucesos violentos del golpe.
La prensa estadounidense, incluso el New York Times, publicó editoriales aplaudiendo el golpe y apoyando al gobierno de facto. (1)
Después del fracaso del golpe de Estado de abril 2002, el gobierno estadounidense entregó un fondo especial multimillonario a los grupos involucrados en el golpe a través de la NED, en junio de 2002.
Ese mismo mes, la Agencia Internacional de Desarrollo de Estados Unidos (USAID), abrió una Oficina de Iniciativas hacia una Transición (OTI) en Caracas, subcontratando a un contratista privado, Development Alternatives Inc (DAI), para canalizar más de 10 millones de dólares a grupos de la oposición.
Meses después, la oposición venezolana lanzó un paro nacional que duró 64 días y afectó toda la cadena de producción del país y casi destruyó la industria petrolera. Causaron más de 20 mil millones de dólares en daños a la economía venezolana y docenas de personas inocentes murieron por falta de acceso a servicios y productos básicos.
En diciembre de 2002, el Departamento de Estado llamó para “elecciones anticipadas” en Venezuela, a pesar de que este concepto no existía en la constitución venezolana.
El 27 de febrero de 2004, grupos extremistas de la oposición venezolana iniciaron violentas protestas de calle con el objetivo de derrocar al gobierno del Presidente Hugo Chávez. Las protestas duraron 4 días y causaron la muerte de varias personas, múltiples heridos y un caos y desorden general en Caracas y otros centros urbanos.
Los líderes de estas protestas las llamaron las “guarimbas”, y admitieron que habían recibido entrenamiento y asesoría del Instituto Alberto Einstein en Estados Unidos y sus fundadores, Gene Sharp y Roberto Helvey, un ex coronel del ejército de Estados Unidos. Sharp es el arquitecto de las llamadas “revoluciones de colores”, o golpes blandos, en el antiguo bloque soviético (Ucrania, Georgia, Kirguistán).
Referéndum revocatorio del 2004: La NED y la USAID canalizaron cientos de miles de dólares a los organizadores del referéndum revocatorio en contra del Presidente Chávez, principalmente a través de la organización Súmate, liderada por la opositora María Corina Machado. Cuando perdieron el referéndum, acusaron al gobierno venezolano de haber cometido fraude y hasta la fecha no han retractado su postura, pero tampoco han presentado pruebas reales para fundamentar sus denuncias.
2005
Después de la victoria del Presidente Chávez en el referéndum revocatorio del 2004, el Gobierno de Estados Unidos endureció su postura hacia Venezuela y aumentó sus agresiones públicas contra el gobierno venezolano. Aquí hay una selección de algunas declaraciones de funcionarios estadounidenses sobre Venezuela:
Enero 2005: El Departamento de Estado lanza un ataque verbal contra Venezuela. “Hugo Chávez es una fuerza negativa en la región.” -Condoleezza Rice, Secretaria de Estado de Estados Unidos.
Marzo 2005: La CIA declara a Venezuela uno de los cinco principales “hot spots” del mundo. “Venezuela es uno de los países más inestables y peligrosos en América Latina.” -Porter Goss, Director de la CIA.
El Pentágono declara a Venezuela como “amenaza”. “Venezuela está comenzando una carrera armamentista peligrosa que amenaza la estabilidad regional.” -Donald Rumsfeld, Secretario de Defensa.
El Comando Sur enfatiza su preocupación sobre Venezuela. “Estoy preocupado por la influencia de Venezuela en el área de responsabilidad… El Comando Sur apoya la posición del comando conjunto de mantener contacto ‘militar a militar’ con los militares venezolanos… necesitamos un enfoque inter-agencia de amplia base para tratar a Venezuela.” -General Bantz Craddock, Comandante del Comando Sur.
Julio 2005: “Cuba y Venezuela están en una campaña de desestabilización en América Latina… No hay duda que el Presidente Chávez está financiando fuerzas radicales en Bolivia.” -Rogelio Pardo-Maurer, Subsecretario de Defensa Adjunto para el Hemisferio Occidental.
“Venezuela y Cuba están promoviendo el radicalismo en la región… Venezuela trata de subvertir los gobiernos democráticos en la región e impedir a CAFTA.” -Donald Rumsfeld, Secretario de Defensa.
Agosto 2005: Relacionan a Venezuela con el terrorismo. “El territorio venezolano es un área seguro para terroristas colombianos.” -Tom Casey, vocero del Departamento de Estado.
Septiembre 2005: Relacionan a Venezuela con el narcotráfico. “El problema de trabajar con el Presidente Chávez es serio y continuo, como lo es en otras partes de la relación.” -John Walters, Director de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas.
Noviembre 2005: Acusan al gobierno de Venezuela de violar los derechos humanos. “El asalto a las instituciones democráticos en Venezuela continúa y el sistema se encuentra en grave peligro.” -Thomas Shannon, Subsecretario de Estado.
2006
Febrero 2006: El Jefe de Inteligencia de Estados Unidos declara al Presidente Chávez “una amenaza”. “El Presidente Chávez sigue utilizando su control para reprimir la oposición, reducir la libertad de prensa y restringir la democracia… es una amenaza.” -John Negroponte, Director Nacional de Inteligencia.
El Pentágono compara al Presidente Chávez con Hilter. “Tenemos a Chávez en Venezuela con mucho dinero procedente del petróleo. Es una persona que ha sido elegido legalmente, al igual que Adolfo Hitler…” -Donald Rumsfeld, Secretario de Defensa.
Marzo 2006: “En Venezuela, un demagogo repleto de dinero proveniente del petróleo está socavando la democracia e intentando desestabilizar la región.” -Presidente George W. Bush.
Intentan vincular a Venezuela con el Terrorismo
Junio 2006: “La cooperación de Venezuela en la campaña internacional contra el terrorismo siguió siendo insignificante…No está claro hasta qué punto el gobierno de Venezuela ofreció apoyo material a los terroristas colombianos.” -Informe Anual sobre Terrorismo, Departamento de Estado.
Estados Unidos imponen sanciones contra Venezuela por “no colaborar suficientemente en la lucha contra el terrorismo” y prohíben la venta de armamento y equipos militares a Venezuela. (Nota: Esta sanción ha sido renovado por el Gobierno de Estados Unidos cada año hasta la fecha).
Julio 2006: “Venezuela, bajo el presidente Hugo Chávez, ha tolerado a los terroristas en su suelo…” -Subcomité sobre Terrorismo Internacional, Cámara de Representantes.
Aumento en Presencia Militar
Marzo - Julio 2006: Estados Unidos realizan 4 maniobras militares por las costas de Venezuela en el Mar Caribe, con apoyo de la OTAN y con sede en la base militar de Estados Unidos en Curazao. Establecen una presencia militar permanente en la República Dominicana y aumentan su capacidad y presencia militar en Curazao y Aruba.
Aumenta la subversión