La última información disponible en el sitio web del Gobierno de la Ciudad acerca de los subsidios otorgados a las instituciones educativas de gestión privada data del mes de abril del año pasado. Y ello no resulta extraño en una gestión que no se caracteriza por su transparencia y que apela a la fuerza de los hechos, imponiendo una legalidad que dista mucho de ser legítima.
Una de las causas por las cuales las escuelas de gestión estatal pierden parte de su matrícula es la gran cantidad de instituciones educativas privadas en sus cercanías.
El Machete, colectivo periodístico docente, elaboró una serie de afiches que indican las instituciones de educación privada en algunos Distritos Escolares porteños. Sin embargo, creemos importante referirnos a 3 de ellos, el 10º, el 9º y el 7º, por cuanto son los más afectados por el cierre de cursos que se intenta imponer durante esta semana.
En el Distrito Escolar 10º, 35 escuelas privadas se llevarán un estimado de $ 121.947.125,59 en concepto de subsidios durante este ciclo lectivo. De ellas, 16 corresponden a escuelas confesionales; es decir, de la Iglesia Católica.
22 escuelas de gestión privada del Distrito Escolar 9º recibirán un estimativo de $ 96.391.937,24 durante este año. De ellas, 13 pertenecen a escuelas dependientes de instituciones de la Iglesia Católica.
En el Distrito Escolar 7º, correspondiente a los barrios de Caballito y parte de Villa Crespo, 25 escuelas privadas percibirán un estimado de $ 75.953.346,44. De éstas, 5 pertenecen a la Iglesia Católica y el resto a empresas privadas de educación.
Si tenemos en cuenta estos tres Distritos Escolares, nos encontramos con 82 instituciones de educación privada; de las cuales, 34 pertenecen a escuelas confesionales. Sin embargo, si analizamos el resto de los distritos podremos advertir que la mayoría de las instituciones de educación privada corresponden a la Iglesia.
Con respecto a los aportes estatales, podemos visualizar que muchas de estas instituciones reciben el 100% de subsidios pero son las que cobran las cuotas más caras. No cabe duda que es un negocio redondo al cual aportamos todas y todos los porteños, incluídos los vecinos de la zona sur.
Recordamos que, desde 2007, estos subsidios vienen siendo incrementados sistemáticamente mientras las carencias en materia de infraestructura siguen en buena parte de las escuelas porteñas y se retacea el salario docente. Por otra parte, si bien el Gobierno porteño aduce haber construído 3 escuelas en la zona sur, resulta evidente la superpoblación existente y nada se hace para disminuírla.
Mientras cierran cursos, los subsidios suben... Primero, la Iglesia y los buenos negocios; después, la Educación Pública para pocos y en particular, para encerrar a los pobres en la pobreza.
Por supuesto, eso es PRO...
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