Ademys denunció persecución y censura contra sus dirigentes por el Ministerio de Educación de la Ciudad.

Mediante un comunicado, Ademys denunció que el Ministro Bullrich concretó sus amenazas de denunciar a los compañeros Manuel Gutiérrez y Néstor Di Milia por “manejar” a los jóvenes para promover hechos de violencia, lo cual fue expresado públicamente con motivo del conflicto por el cierre de cursos y la movilización de estudiantes del Colegio Nº 13, realizada el pasado 13 de junio.

La confirmación de ello, aconteció durante la entrevista gestionada por la Comisión de Estatuto con Alejandro Finocchiaro, Subsecretario de Políticas Educativas y Carrera Docente, quien manifestó que el Ministerio no recibiría a los dirigentes mencionados anteriormente por cuanto la cartera había iniciado una causa judicial contra ellos.

El sindicato docente porteño rechazó estas acusaciones por su evidente falsedad y afirmaron que esta decisión viola la normativa vigente en materia de libertad sindical, el derecho a peticionar y el reconocimiento a los dirigentes elegidos por las y los trabajadores, además de constituír una clara descalificación.

Por otra parte, recordaron que aún queda resolver la causa por la violencia ejercida sobre los docentes por parte de una patota en “zona liberada” en noviembre del año pasado en ocasión de tratarse la reforma de las Juntas de Clasificación.

Con respecto a la clara persecución y censura, manifestaron que presentaron denuncias ante el Ministerio de Trabajo de la Nación y la Defensoría del Pueblo con el objeto de detener este intento de judicialización, cuya finalidad es la de disciplinar al movimiento docente de la Ciudad, lo que incluye amenazas a directivos y docentes de diferentes escuelas.

Asimismo, el sindicato docente hizo responsable al Gobierno de la Ciudad por la seguridad de todos los docentes, activistas y miembros de organizaciones sindicales y de las consecuencias que este discurso estigmatizador pueda acarrear, como también convocaron a expresar su repudio contra la persecución a sus dirigentes y la solidaridad con ellos a las organizaciones sociales, sindicales y políticas.