Científicos del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) con sede en La Habana investigan varias vacunas contra el cáncer y la Hepatitis B, las cuales podrían estar listas dentro de cuatro o cinco años, informó un directivo de esa institución.
"Tenemos proyectos que en cuatro o cinco años se convertirán en resultados, listos para el mercado", dijo a la prensa el director general del CIGB, Luis Herrera, quien agregó que en América Latina esa es la empresa de mayor impacto y operatividad comercial en esa esfera.
El experto detalló que entre esos planes figura una vacuna terapéutica contra la Hepatitis "B", nombrada NASVAC, que se aplicará por vía nasal y que en la actualidad está en fase de ensayo clínico en Bangladesh.
También se prepara un péptido, el CIGB-300, que actúa a nivel de las enzimas para combatir el cáncer a través de los que los especialistas califican como una diana terapéutica, lo que permite la aplicación simultánea de otras terapias.
"Otro proyecto es la modificación genética del factor de crecimiento vascular (VEGF), que se emplearía como antígeno en forma de inyección para combatir el cáncer, pues produce un anticuerpo que impide el crecimiento tumoral", afirmó Herrera.
El director del CIGB agregó que ese medicamento también podría empelarse contra los edemas de la mácula, causantes de la pérdida de la visión en las personas mayores.
"Todos esos productos ya tienen patentes, lo cual se vuelve en un atractivo para los negocios", aseveró.
Herrera señaló que "si bien en etapas anteriores primaba la generación de tecnologías para obtener productos ya existentes, en la actualidad se prioriza el trabajo por la creación de nuevos fármacos y terapéuticos".
El CIGB, cuyas principales instalaciones están en La Habana, también tiene dependencias en las centrales provincias de Sancti Spíritus y Camagüey, las que trabajan de manera coordinada en el desarrollo de esos proyectos.
Cada proceso de investigación y producción lleva entre 10 y 12 años como promedio, por lo que "es indispensable crear una base organizativa asegurando la continuidad al margen de la movilidad de las personas".
El producto líder del Centro sigue siendo el HeberProt-P, única vacuna que en el mundo ha posibilitado una reducción en casi cuatro veces los índices de amputación por úlcera de pie diabético.
El medicamento, que se inyecta directamente en la herida, constituye un producto con demostrada validez internacional en la cicatrización de lesiones.
En la actualidad el fármaco está registrado en 17 países y antes de 2015 se espera que esté en más de 50 naciones, porque la necesidad sigue creciendo pues la enfermedad hoy aqueja a 300 millones de personas y en pocos años el número de enfermos puede llegar hasta 450 millones.
La diabetes es considerada como una pandemia no transmisible cuyo impacto continuará creciendo en todo el planeta, "por lo que las úlceras del pie diabético seguirán siendo una gran complicación".
El CIGB, que tiene una empresa comercial, Heber Biotec S.A, encargada de vender sus productos, cuenta con más de 240 registros sanitarios aprobados en más de 50 países, lo que le permite realizar exportaciones hacia 37 naciones.
Heber Biotec exporta también la vacuna contra la Hepatitis "B", aprobada desde 2001 por la Organización Mundial de la Salud, y que ha permitido que todos los cubanos menores de 30 años estén inmunizados contra ese virus.
En la isla, desde 2000 no se reporta ningún caso de hepatitis "B" en niños menores de cinco años y desde 2007 en menores de 15.
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