Por Gustavo Robles
Decimos ok, man, master, “a full”, shopping, pack, chicle (chiclets), sándwich, hot dog, delivery, restaurant, récord, poster, aerobic, mountain bike, backstage, casting, fashion, top model, bar, blue jeans, jogging, shorts, pantys, slip, bóxer, baby-doll, sport, topless, gel, spray, lifting, guinnes, paty (por hamburguesa), lunch, yes, bye, what??, Fuck!! What the fuck??, Darling, my god, oh, my god!!, bulling, boy-scouts, Fútbol (foot-ball), knock out, water polo, surf, rafting, motorman, skate, drink, weekend, cd, disket, chat, clip, mail, twit, Fesibuc (por facebook), app, feedback, download, software, googlear, scan, scanear, randomizar, hd, click, roaming, express, market, store, ticket, chequear, clearing, royalties, copyright, commodities, pc (personal computer), heavy, “uai fai” (wifi), “on demand”, “direct tv”, holdouts, out let, skinhead, dólar blue, cool, copy, flashear, garage, junior, man, Money, party, porche, streaming, speaker, walkman, tape, cassette, “uoki-toki” (walkie - talkie), estándar, status, freaking, stress… y la lista sigue.
Comemos en Mc Donald's, tomamos Coca Cola, nos gustan las hamburguesas, ingerimos comidas calientes y calóricas para el invierno en las fiestas cuando acá es verano, valoramos como joya lo que viene del Norte, leemos sus libros, glorificamos sus leyes, sus sociedades, los tratamos como superiores, soñamos con conocer Nueva York, París, Roma o Londres, nos vestimos según las modas que ellos dictan, corremos detrás del dólar o del euro, nos matamos por sus películas y los programas de tv, somos adictos a su música, esperamos ansiosos la entrega de los Oscars, los Grammy, los Emmy y los premios de Cannes, aguardamos seriamente la entrega de los premios Nobel, festejamos Navidad, Año Nuevo, Pascuas, y desde hace un tiempito hasta Halloween, San Patricio y San Valentín..
Nos quejamos de los piratas que usurparon nuestras Malvinas, pero no decimos nada de los sajones que son dueños de vastos territorios nuestros continentales, y vamos a hacer transacciones comerciales a sus empresas sin ningún complejo.
Y al mismo tiempo que reclamamos por nuestras islas, le regalamos nuestras tierras a los chinos…
Claro que las cosas se ponen más turbias aún… Porque lo que se describió arriba es consecuencia de lo que sigue…
La Cámara de Comercio Norteamericana en la Argentina cuenta con 606 empresas - miembros. La Británica también tiene una lista gorda de socios. Nuestra economía está hoy aún más extranjerizada que en los ' 90 del turco innombrable. Hace poco escribí “Según el Instituto de Estudios Fiscales y Económicos (IEFE), en su balance de la ' Cuenta Corriente 2002 - 2011 ', indica que después de la devaluación del gobierno duhaldista y la continuidad kirchnerista, y el consecuente aumento de la productividad y las exportaciones, ' beneficiaron mayormente al capital extranjero, cuya presencia entre las empresas más grandes del país se ha consolidado ', a pesar del discurso oficial de recuperar la soberanía a través de un ' capitalismo nacional ' . Da cuenta de ello que la cantidad de empresas extranjeras entre las 500 de mayor tamaño de la economía ha pasado de 221 en 1993 - 2001 a 292 en el período 2002 - 2008 y que su peso en la generación de valor bruto de producción y en las exportaciones se ha incrementado, pasando del 56% al 75,4% y del 41,7 al 57%, respectivamente, entre ambos periodos. Eso, en la actualidad se ha mantenido o empeorado”.
Para nuestro desarrollo, nos han condenado a depender de inversiones y financiación foráneas. Por eso la “nacionalizada” YPF, que está en un 49% en manos extranjeras y de buitres, debe asociarse con los chinos, Rockefeller, Chevron, Petronas, Exxon o cualquier multinacional que se presente con sus ansias de ganancia y saqueo para extraer lo que es nuestro. Por eso la multinacional Monsanto ha logrado que se respeten sus patentes para hacer suyas no sólo las semillas y los agroquímicos con las que mata a nuestros pueblos campesinos, sino también las que se cosechen de ellas. Por eso la exportación agropecuaria está en manos de las multinacionales Cargill, Dreyfuss, Noble Group, Nidera y Cofco en un 80% de la producción “nacional”, en lo que constituye una verdadera “Junta Multinacional de Granos”, que cobra los dólares de esa actividad comercial y los deposita las retenciones al fisco cuando se le antoja. Por eso la producción minera está básicamente en manos de la multinacional Barrick Gold, aunque también otras (multinacionales) operan saqueando nuestras riquezas, como Canadian u Osisko. Por eso las telefónicas están en manos de españoles, italianos y franceses, los celulares de españoles, mexicanos y franceses, lo mismo que el gas o las eléctricas, que no paran de dejar a oscuras a sus usuarios… Es decir, TODOS nuestros recursos estratégicos están en manos de multinacionales extranjeras. Si hasta los fondos del Anses, nacionalizados de las Afjp, se utilizan para pagarle lo que no debemos al Sistema Financiero Imperialista, para no sacar los pies del plato de su globalización…
Hoy, hasta los pibes que gritan “liberación”, aplauden esta entrega. Lo que constituye un aberrante retroceso en la conciencia de una gran parte de nuestro pueblo… y de su juventud. Por eso no es de extrañar que esos que hacen flamear las banderas celestes y blancas en cada “fecha patria” y cada acto oficialista, más el resto de los pibes del país, utilicen los términos con los que empezaba esta nota.
Con semejante colonización cultural, es mentira cualquier declamación independentista.
Quienes entienden cómo funciona el mundo hoy, saben que se rige según los canones fijados por las potencias imperiales. La globalización no es más que la aceptación o la imposición de esas reglas. Quienes se someten a ellas, no sólo no son independientes, sino que se asumen dentro del estatus moderno del coloniaje. Sólo los que rompen con esos parámetros pueden aspirar a ser soberanos.
Entonces… ¿de qué independencia hablamos? ¿de qué independencia hablan nuestros gobernantes, sobre todo esta presidenta que no se amilanó en desdeñar a nuestra La Matanza para elogiar a Harvard, que no se avergüenza de expresarse continuamente en el idioma de nuestros colonizadores modernos, “my Darling”, “oh my god”, “plis” y demás términos sajonizantes?
Por más que la señora Fernandez de Kirchner cacaree sobre la “independencia” “lograda” por el kirchnerismo, la realidad la contradice en cada una de sus palabras, tan vacías de verdad como nuestra soberanía.
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