Por Norelys Morales Aguilera
El gobierno de Estados Unidos no tiene la intención de hacer cambios en la política migratoria que se aplica a los ciudadanos cubanos, según el Comunicado de la Delegación cubana al término de la ronda de conversaciones migratorias, efectuadas en Washington, este 30 de noviembre. (1)
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Para la parte cubana, esas políticas "entorpecen la normalización" de las relaciones migratorias bilaterales, y "generan problemas a otros países de la región", de acuerdo con el informe de AFP.
La portavoz del Departamento de Estado, Elizabeth Trudeau, dijo que Estados Unidos se proponía impulsar en la reunión una discusión sobre la forma en que los países "pueden contribuir a combatir el contrabando de personas que se aprovecha de los inmigrantes cubanos".
Trudeau añadió además, que en la visión de Washington los gobiernos tienen el "derecho soberano" de retornar a sus países de origen a migrantes "que no tienen un pedido válido de asilo ni base legal para permanecer en un país".
Tal vez, Washington, al confirmar que no va a cambiar su política migratoria hacia los cubanos, supone, equivocándose, como tantas otras veces en el pasado, que ello desestimularía la emigración ilegal, y si no, le creará dificultades al gobierno cubano.
Con fundamento, el catedrático cubano Leyde Rodríguez Hernández, en una entrevista con Tiempo Argentino realizada por el periodista Fernando Capotondo, ha dicho que "...con Estados Unidos hubo un restablecimiento de las relaciones diplomáticas, pero en ningún momento se avanzó hacia su normalización… En la política de Obama se aprecian más acciones verbales que actos concretos". (2)
El diplomático y profesor del Instituto Superior de Relaciones Internacionales Raúl Roa García, de La Habana, explicó que, a pesar de que por el establishment estadounidense, Barack Obama decidió negociar con el gobierno cubano, que encabeza Raúl Castro, el núcleo duro del conflicto, que es todo el conjunto de hostilidades, sigue en pie. No se ha desmontado el aparato de agresión contra Cuba.
Todo indicaría, que la ralentización de un proceso que desató tanto entusiasmo en Estados Unidos, Cuba y el mundo, es parte de un juego político dirigido, precisamente a no desmontar todo el aparato agresivo contra Cuba.
NOTAS:
(1) http://islamiacu.blogspot.com/2015/11/cuba-usa-conversaciones-migratorias.html
(2) http://tiempo.infonews.com/nota/197118/estados-unidos-no-ha-desmontado-su-aparato-de-agresion-contra-cuba
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