Partió como ella quiso. En su Uruguay natal. Con 92 años bien vividos y una extraordinaria carrera artística que la tuvo como protagonista hasta el 2012.
Fue dueña de una generosidad que supo ser apreciada por muchas y muchos. La anécdota que recordara el actor Carlos Perciavalle apenas es un detalle más que habla de esa personalidad escondida y que pocos conocían.
Nosotros preferimos recordarla con la fotografía que ilustra esta nota. Es una de las dos que se tomaron en ocasión de acercarse a una marcha de personas con discapacidad en la Plaza de Mayo, que organizaba la compañera Gladys Ferrara.
Alguien la había contactado y de repente, apareció bajando de un taxi para acercarse a las y los pocos que allí estábamos. Conversó con todas y todos, se interiorizó de lo que ocurría y hasta firmó el petitorio que ibamos a presentar en la mesa de entradas de la Casa de Gobierno por esos derechos históricamente cercenados.
Bastó casi una hora que estuvo entre sillas y muletas. Parecía una eternidad. Pero fue la muestra cabal de su esencia solidaria y de esa manera, queremos despedirla.
¡¡ Hasta siempre, China Zorrilla !!
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