Cuba presente en el MERCOSUR sin ser un país miembro

Marcha opositora del 16/12 (AGENCIA AIM)

Por Mario Daniel Villagra Segovia

Esta semana (1) Entre Ríos vivió la 47ª edición de la Cumbre del MERCOSUR. No fue el hecho que se llevó todos los comentarios políticos, económicos y culturales de la prensa. La noticia de la apertura del diálogo entre Cuba y EE. UU. se metió en la mesa de los Jefes y Jefas, sin ser el país caribeño uno de sus miembros. Así se llevó parte de la atención. Sin embargo, en Paraná se vivió como un hecho histórico que dejó varios planos para ver.

Un primer es para la campaña propagandística para su actual Gobernador Sergio Urribarri. El Gobernador se mostró jugando al fútbol, también faltó a recibir a algunos presidentes como Dilma Rousseff, de Brasil. En términos económicos, en concreto no se puede hablar de cuánto se gastó para la realización de la Cumbre, pues como dijo el periodista Mario Alarcón Muñiz “no hay información. Por ahí se habla de 40 millones de pesos”. Lo cierto es que hace menos de dos meses, la Legislatura autorizó por ley al Poder Ejecutivo a gastar para la Cumbre, sin licitaciones, concursos ni limitaciones. Se dice que solamente para garantizar la seguridad se dispuso de 25 millones.

Traemos a primer plano al MERCOSUR. Vemos que en 24 años desde su creación, la 47ª Cumbre fue un intento para reorientar la política que desde su inicio se planteó como una plataforma económica. Queda clara esta maniobra cuando Urribarri dice: “en la última década pasó de una agenda exclusivamente comercial a constituirse en un proceso de integración que incluye las dimensiones política social, cultural, productiva, identitaria, y que persigue el desarrollo con inclusión y la ampliación de los derechos de nuestro pueblos”. Pero eso fue el discurso. Los objetivos oficiales del MERCOSUR, en síntesis, son:

1.  La libre circulación de bienes, servicios y factores productivos entre los países;

2.  el establecimiento de un arancel externo común y la adopción de una política comercial común;

3.  la coordinación de políticas macroeconómicas y sectoriales entre los Estados Partes: de comercio exterior, agrícola, industrial, fiscal, monetaria, cambiaria y de capitales, de servicios, aduanera, de transportes y comunicaciones y otras que se acuerden, a fin de asegurar condiciones adecuadas de competencia entre los Estados Partes.

Los puntos muestran una manera de encontrar protección entre las burguesías criollas. Utilizando un término compuesto, dado que la burguesía no tiene nación, aunque sí tienen las naciones burguesías. 

Otro plano visto de la organización social y política fue la movilización que manifestó su malestar con el gobierno y con la organización del MERCOSUR. Pues algunos pusieron su descontento por todo lo que tuvo que vivir el ciudadano. Otros también subrayaron lo inconsulto de la agenda y los temas a discutir por las organizaciones sociales y políticas en torno al MERCOSUR. Todo un sector donde se pudo ver parte de la Federación Agraria y sectores de la Sociedad Rural que se prenden en el tren; estos marcharon el miércoles hasta el acceso al Túnel que conecta con la vecina provincia de Santa Fe. Mientras que el martes lo hicieron hacia Casa de Gobierno los gremios vinculados con el Estado, especialmente los nucleados en ATE y los docentes, con una fracción de AGMER más la CTA que reconoce a Pablo Micheli como su Secretario General, algunos estudiantes, movimiento sociales y partidos políticos.

MERCOSUR EN EL MUNDO

Otro plano, y quizás el más importante y menos visto, es uno que pone el periodista Muñiz, cuando compara al MERCOSUR con otras plataformas. Ahora bien, sólo lo hace con la Comunidad Económica Europea (CEE), y acota que luego se crea el Banco Europeo de Inversiones y que posteriormente se transformó en Unión Europea (UE) en 1999, y que en ese año adoptó el euro como moneda común que se puso en circulación en 2002. De hecho, el canciller Héctor Timerman anunció un intento de libre comercio, y el envío de un listado de bienes y servicio a la Unión Europea. Más la noticia de la relación comercial con Libano, entre otros anuncios.  

Siguiendo en el mismo plano, al MERCOSUR habría que compararlo con otra plataforma en nuestro continente Abya Yala. Así cobran sentido las declaraciones de Urribarri que citamos anteriormente. Hay una disputa en torno a qué plataforma política, económica, social y cultural hay que seguir. Y eso quedó en evidencia ante una pregunta del periodista de TELESUR a Evo. Morales dijo: “Una tarea, una responsabilidad con los pueblos de América Latina y el Caribe que gestó Fidel Castro y Hugo Chávez se consolidan (…) porque los países del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) tienen un principio de integración de carácter social, política y económica. Y Mercosur es un espacio económico y ese es el debate que tenemos entre presidentes”. Morales no solamente le metió un caño a Urribarri en el partido de fútbol que jugaron el martes, como esas palabras también le metió una discusión central que es la vida del ALBA - TCP (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos) que se declara abiertamente en la construcción socialista.

Y no es un dato menor la mención de Evo Morales, comparando el MERCOSUR al ALBA - TCP. Pues, si de independencia económica y política se habla, el ALBA - TCP creó una moneda propia llamada SUCRE (Sistema Unitario de Compensación Regional), como una estrategia para dejar de depender del dólar. Dicho sea de paso, el Estado Argentino no integra el ALBA - TCP, es por eso que en 2011 se lanzó una campaña para que lo integre. Y no es un dato menor, pues ahora con la noticia de Cuba y la apertura de diálogo con EE. UU., el desafío es apoyar a Cuba pues, como dijo Modesto Guerrero, “en medio de la penuria económica, el aislamiento diplomático, las provocaciones militares, las presiones financieras y la agresión mediática se logaron preservar parámetros de esperanza de vida, escolaridad o mortalidad infantil muy superiores al resto de la región. Esta extraordinaria realización resulta incomprensible para los apologistas del capitalismo”.

La discusión de si apoyar al MERCOSUR, en este caso, o al ALBA - TCP, que es el antecedente previo a la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), están en el mismo plano. Vienen a cuento de una discusión ideológica, y no política, que data desde las primeras revoluciones libertarias. Nace con la discusión de superar los males que generó la invasión española, con sus modos de producir y habitar el mundo. “Nosotros somos un pequeño género humano; poseemos un mundo aparte: cercado por dilatados mares, nuevo en casi todas las artes y ciencias  aunque en cierto modo viejo en los usos de  la sociedad civil”, decía Simón Bolivar en Carta desde Jamaica.

Entonces, desde aquellas primeras revoluciones en nuestra Abya Yala, antes de que existieran los aportes de Marx y Engels y todas las revoluciones, subyace una premisa que es la revolucionar las revoluciones. Si el MERCOSUR no se revoluciona, morirá como un buen intento, lo mismo para el ALBA o la CELAC. Lo que los gobernantes y los asesores económicos, culturales y educativos deben entender es lo que descubrió Oscar Wilde en “El alma del hombre bajo el socialismo”, a decir ¿por qué deberían agradecer las migas que caen de la mesa de los ricos? Ellos también deberían estar sentados a la mesa, y están comenzando a darse cuenta de eso.

NOTAS DE LA REDACCIÓN:

(1) La Cumbre del MERCOSUR se llevó a cabo del 14 al 18 del corriente.