El Cambray, una desgracia que evidencia nuestra mediocridad (Crónicas de una Inquilina) El Cambray II (Guatemala) Foto : Gentileza Telesur Por Ilka Oliva Corado @ilkaolivacorado Por desgracia una fatalidad como la ocurrid...

El Cambray, una desgracia que evidencia nuestra mediocridad (Crónicas de una Inquilina)

El Cambray II - Guatemala - Telesur

El Cambray II (Guatemala)

Foto: Gentileza Telesur

Ilka Oliva Corado

Por Ilka Oliva Corado

@ilkaolivacorado

Por desgracia una fatalidad como la ocurrida en El Cambray II, demuestra nuestra mediocridad. La insensibilidad que tenemos como país. La doble moral esa para decir que elevemos una oración por las víctimas pero nos quedamos en nuestras casas de brazos cruzados. Y saca a flote también toda la escoria de los oportunistas que, como el presidenciable Jimmy Morales, aprovechan la calamidad ajena para promocionarse. Es deshumana una bajeza así. Una desgracia como la de El Cambray evidencia qué calidad de gente es la que vive en los arrabales, esas áreas marginadas y estereotipadas señaladas con crueldad como clicas de criminales y de putas sidosas, son los lugares donde el sistema obliga a vivir a los más golpeados de las clases sociales. Gente honesta, creativa, transformadora, fiel en solidaridad humana. Gente que, de vivir en otro lugar, sería respetada.

¿Duele verdad? Duele ver esas imágenes tan desgarradoras. Pues en lugares como El Cambray viven niños que lustran zapatos, niñas que venden tortillas, niñas que son abusadas sexualmente en casas de citas y en los bares que todos vemos y fingimos no ver. En arrabales así es donde las autoridades gubernamentales realizan las limpiezas sociales, ¿lo creeríamos en este momento de dolor? ¿nos atreveríamos a imaginar a un escuadrón policial secuestrando niños y adolescentes, violando niñas y desapareciéndolos? Pues sí, sí sucede todos los días a todas horas. ¿A quién le importa? ¿A qué sistema, a qué sociedad clasista y racista? Solo cuando suceden desgracias así es cuando logramos ver tan solo la punta del témpano. La sorpresa nos dura unos días y después la olvidamos.

También en lugares así viven bomberos, policías, docentes, panaderos, maquiladoras, ahí vive la clase obrera y proletaria. Esa gente a la que quienes viven dentro de una burbuja de comodidad debido a su clase social tratan de ladrona, de violenta, de ignorante. Y dentro de la desgracia El Cambray tuvo la suerte de estar a las afueras de la capital porque otro gallo hubiera cantado de haberse tratado en un pueblo lejano, peor en occidente donde viven “esos indios patas rajadas talishtes.” Para nuestra -que no fue alud pero tiene que ver- la Masacre de Alaska que la gente urbana tomó como buen accionar del gobierno del criminal Otto Pérez Molina. O el ecocidio del río La Pasión que todavía tiene afectadas a docenas de comunidades rurales y se llevó ya una vida de un defensor de los recursos naturales, vida arrebatada a consecuencia del sistema corrupto del país. ¿Qué gente urbana se ha manifestado por eso? ¿Qué gente urbana se ha movilizado para llevar víveres a las comunidades que comían del río y de la flora y fauna en sus alrededores?

Un punto muy relevante es la ineptitud de las autoridades a cargo, la estupidez de CONRED al no aceptar la ayuda inmediata de los Topos de México, me recordó a la estupidez y arrogancia de Álvaro Arzú al no aceptar el TPS que le ofrecía Estados Unidos cuando lo del huracán Mitch. ¿Dónde se ha visto que en una tragedia así un equipo de rescate se enfoque en buscar cuerpos y no sobrevivientes? ¿Es ineptitud solo de las autoridades guatemaltecas? Sello propio tenemos, de seguro. Ahí estaban docenas de vecinos que conocen El Cambray a la perfección dispuestos a ayudar, con piocha y palas en mano y no los dejaron bajar al área del desastre. ¿Qué nivel de incoherencia es ese? No, si no se trataba de echar a perder pruebas de un asesinato, se trata de salvar vidas. Qué mejor que la gente que conoce el lugar. Pero como arrogantes nos pintamos solos. ¿Por qué si no dejan pasar a un hijo de vecino dispuesto a ayudar dejan pasar a un mequetrefe como Jimmy Morales que solo fue por la foto?

Por supuesto no son desgracias naturales, se evitarían si en Guatemala existiera un gobierno que realmente se preocupe y trabaje para su pueblo. Un país donde el recurso económico sea utilizado para lo que se debe. Si desde el presiente hasta los alcaldes fueran honestos, si el sistema no estuviera corrompido. Si nosotros mismos fuéramos honestos. No, para quienes piensan que saliendo a manifestar lograron tocar el cielo con las manos y se creen dignos y honrados lamento decirles que cuando venía lo mero bueno decidieron desistir, no se tuvo que ir a votaciones, y más votando por la misma escoria que supuestamente intentaron sacar del poder, hablo de Jimmy Morales que es el candidato oficial del ejército, el Cacif y de la Embajada de Estados Unidos en Guatemala. Guatemala necesita ser transformada desde la raíz. Y para eso se necesitan arrestos, no salidas a broncearse, ni foros, mucho menos vítores. Se necesitan agallas.

Qué bueno por quienes han ido a dejar víveres, zapatos, ropa, medicina a los centros de acopio, pero no crean que con eso Guatemala será transformada. También lo digo por los migrantes que han enviado dinero en remesas expresamente para ayudar en la tragedia de El Cambray, y en las mismas están reuniendo dinero (en miles de dólares) para ayudar en la campaña de Jimmy Morales. O sea… ¿aló? Ajá aunque no lo crean, aquí hay miles de migrantes (comandados por ojetes y orejas que llevan viviendo aquí desde el tiempo del Conflicto Armado Interno) que están apoyado con dinero la campaña del moralejo. Y aguas porque es gente muy pero muy “honesta”. De esas personas que tienen reconocimientos de los alcaldes de los Estados y que en Guatemala los reciben con honores por ser migrantes triunfadores y empresarios. Aguas…

La ineptitud con la que el gobierno está tratando el rescate de El Cambray nos refleja, en dejadez, en racismo, en desidia y en doble moral. Pero como nunca se debe generalizar que bien por quienes han decidido apoyar con algo más que víveres, hablo de los que tienen profesiones: psicólogos, sociólogos, doctores, enfermeras, bomberos, paramédicos, que se han acercado para ayudar con el recurso humano aparte de dar su aporte en víveres y ropa. Hablo de los obreros que, con piocha y pala en mano, han llegado al lugar. A las mujeres y niñas que están ahí frente a un comal echando tortillas, preparando comida para alimentar a los rescatistas. Esa es la gente que logra transformar el país. Cuando se involucra más allá de los protocolos y de las fotos para las redes sociales. Comprendo que hay quienes no logran movilizarse y envían sus donativos, también es aplaudible.

Pero hoy es El Cambray, mañana será otro arrabal, se trata de evitar más tragedias y para eso no basta con votar. Para transformar Guatemala se necesita barrer por completo con el sistema corrupto y eso necesita de acción, de una acción que venga con arrestos, no con cartelitos de colores y votaciones que sigan solapando el mismo sistema.

Hoy fue un alud como tantos otros en cada invierno. Pero hay niños que están muriendo de hambruna, niñas embarazadas por violación, feminicidios, jueces corruptos, alcaldes ladrones, ¿acaso queremos continuar con eso? ¿Qué más necesita Guatemala para ir por el cambio real? ¿Cuántos derrumbes más, violaciones, muertes, desfalcos?

Pero como todo, El Cambray también pasará y quedará en el olvido. Carecemos de Memoria Histórica los guatemaltecos. Si nos dolió lo de El Cambray tengamos un poquito de imaginación y pensemos en las masacres del Conflicto Armado Interno, pues Jimmy Morales es el candidato de quienes las perpetraron. Todo en Guatemala se repite, porque nosotros como sociedad lo permitimos. Somos incapaces de ser humanos. El sistema tiene que ser reconstruido desde los cimientos. ¿Para cuándo nos armamos de arrestos y dejamos se sentirnos héroes con nuestros cartelitos de colores?

El cambio urge pero para ayer, nos toca sacar fibra, dejemos la choya y nuestra mediocridad.

No hay comentarios. :

Publicar un comentario