16 años pasaron desde aquel día en el cual el horror se apoderó de quienes estamos en la trinchera informativa, cuando conocimos la suerte del compañero reportero gráfico de la revista Noticias.
Sin embargo, José Luis sigue vivo entre nosotros a pesar del ninguneo de los multimedios, los cuales apenas escribieron unas líneas refiriéndose a los actos de homenaje que se realizarán durante este fin de semana.
Su vida fue el testimonio del periodismo que busca lo oculto tras los telones del poder, mientras que su muerte es la clara evidencia de una impunidad incesante tras la liberación de sus secuestradores. Supo revelar una cara oculta del poder económico y su asesinato permitió comenzar a indagar sobre la realidad en la actividad periodística y sus condicionamientos.
Y sigue estando presente. A cada minuto y a cada hora que nos dedicamos a narrar lo que acontece en nuestro país, en Nuestramérica y en el mundo. Porque es la llama que nos incentiva a seguir trabajando por un periodismo por y para el pueblo.
José Luis Cabezas, ¡ presente ! ¡ ahora y siempre !
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